Ya tenemos nuestro lombricompostador, nuestras lombrices y ya sabemos como alimentarlas. Ahora lo que nos queda por delante, es el trabajo clave de todo. El mantenimiento del funcionamiento del lombricompostador.
Son 4 puntos principales a tener en cuenta para el mantenimiento de nuestro lombricompostador.
1.- La humedad.
El sustrato o como me gusta más decirle la biomasa (técnicamente es correcto) donde viven las lombrices debe tener un nivel de humedad del 80 - 90 % de humedad.
¿Cómo medimos esa humedad? Es un tema de tacto y/o vista. Si no tienen rechazo a tocar la biomasa (donde pueden haber lombrices) este dibujo nos ayuda mucho.
Otra forma, que es la que yo uso. No porque rechace tocar la biomasa, sino que me da miedo apretar alguna lombricita. Es la vista, la humedad de la biomasa debe ser similar a la que tiene la borra del cafe cuando la sacamos del filtro de la cafetera.
¿Cuándo tenemos que agregar agua? No hay una regla fija. Depende del nivel de humedad de la biomasa, recordemos que estamos participando en un proceso biológico. Si usamos la borra del café, esta tiene bastante humedad y suele ayudar mucho a equilibrar el la humedad de la biomasa. Otro aporte de humedad, lo dan los mismos alimentos. Y finalmente esta el líquido que eventualmente cae en el plato que colocamos en la base del lombricompostador. Esa la podemos volver a echar en el lombricompostador
Ya respondiendo la pregunta, hay que incorporar agua cuando luego de mover la biomasa está mantiene una textura terrosa. Allí agregamos agua, preferiblemente de lluvia o lo que llamamos serenada. Es decir ponemos un ponchera con agua en un lugar ventilado durante una noche. Ustedes dirán, esta gente si inventa tonterias. No, lo que pasa es que el agua que sale de las tuberias tiene cloro para potabilizarla. Y el cloro, mata la micro fauna que vive en la biomasa. Al dejarla al aire, ella por evaporación pierde el cloro. Pero como siempre, no nos enredemos si estamos apurados y lo que tenemos a la mano es agua del chorro, vamos a usarla. Y prestemos mucha atención al plato del lombricompostero, donde en el caso de haber exceso va a caer el excedente. No vaya a ser que hagamos un reguero en nuestra cocina.
¿Y cómo sabemos si hay mucha humedad en el lombricompuesto? El lombricompostador debe tener la humedad equilibrada. Como lo vemos en el dibujo. Si hay mucha humedad el proceso de descomposición se afecta y nuestro lombricompostdor empazara a oler mal. Si vemos que esta oliendo mal por que la biomasa tiene excesiva humedad, la solución es muy fácil. Agregemos papel o cartón picado y revolvamos. La humedad en exceso la absorbera el papel. Y luego las lombrices se lo comeran.
2.- La cantidad de alimentación
En otras notas ya lo hemos escrito. No debemos darle más comida a las lombrices que las que ellan puedan comer. Si lo hacemos corremos el peligro de que nuestro lombricompostador huela mal, por qué ese alimento se va a descomponer antes de que las lombrices se lo puedan comer. Si ocurriera que le damos comida en exceso, podemos paliar la situación tapando muy bien esa comida. Y claro no dandole más por unos días.
3.- Tapar, tapar y tapar
Siempre debemos tapar el alimento que le damos a las lombrices. Para esto es muy práctico tener en la mismo sitio donde tenemos el lombricompostador, el material para tapar. Puede ser la borra del café, papel y cartón picado, hojas secas. Y de ser necesario, lo tapamos con la misma biomasa del lombricompostero. Pero NUNCA debemos dejar de tapar.
4.- Revisar y observar.
Solo unos minutos son necesarios, revisemos el plato no vaya a ser que haya caído agua y se pueda derramar. Revisemos a ver si hay hormigas, las archienemigas de nuestras lombrices. Si hay hormigas, veamos si podemos mudar nuestro lombricompostador y coloquemos agua en el plato. jijijij Las hormigas no nadan.
5.- Lombriz Roja Urbana está a la orden para acompañarlos en este "aprender haciendo". En caso de problemas o dudas, escriban a lombrizrojaurbana@gmail.com. Les vamos a contestar.