Qué es el hidrógeno como fuente de energía
El hidrógeno como fuente de energía es una de las llamadas energías renovables más interesantes. Se trata del elemento más abundante y por tanto su uso podría ser prácticamente ilimitado. Se trata de una energía limpia que no deja restos ni contamina el aire y el oxígeno.
Diferencias entre Hidrógeno Gris, Hidrógeno azul e Hidrógeno verde
Existen diferentes tipos de hidrógeno como combustible:Hidrógeno gris. Se trata de un tipo de hidrógeno que necesita de combustibles fósiles para funcionar. Es el tipo que se usa en las refinerías y en la industria química, y sigue siendo contaminante.
Hidrógeno azul. A diferencia del gris, este tipo de combustión sigue necesitando para su producción de combustibles fósiles y genera carbono, pero en menor medida que el gris o que otras fuentes de energía como el petróleo, el carbón o el gas.
Hidrógeno verde. Pese a ser el menos común en el mercado, es el más limpio y es el que nos interesa, ya que los otros solo son opciones para perpetuar el uso de combustibles contaminantes.
Ventajas e inconvenientes del hidrógeno como combustible
Al ser una de las fuentes de energía con más crecimiento, ya que desde el año 1975 la demanda del hidrógeno como combustible se ha triplicado, estamos hablando de una de las fuentes energéticas más prometedoras e interesantes en la carrera urgente por abandonar otras energías menos limpias y más limitadas, como los hidrocarburos o la energía nuclear.Existe el proyecto de conseguir hacer de esta energía una fuente de combustible para coches y vehículos estandarizada, aunque en la actualidad es algo marginal y son pocos los coches que funcionan con esta energía y son realmente muy caros.
Veamos ahora sí las ventajas e inconvenientes del hidrógeno como combustible.
Ventajas
El hidrógeno como combustible se puede usar tanto para generar como para almacenar energía.No es tóxico ni contaminante, siempre que estemos hablando del hidrógeno verde.
Por lo demás, abunda en la naturaleza. Tengamos en cuenta que el 70% del planeta es agua, y al ser la fuente natural más abundante, su uso podría ser sostenible e ilimitado. Además, las aguas residuales y otros desechos orgánicos contienen hidrógeno
Siempre en el caso del hidrógeno verde, se trata de una energía sostenible y renovable.
Además, es una energía 100% limpia que no emite carbono ni contribuye al efecto invernadero, sino que el residuo de esta fuente de energía no es nada más ni nada menos que agua.
Tiene una eficiencia altamente demostrada, es un tipo de energía muy segura en espacios abiertos, y además es silenciosa.
Inconvenientes
Uno de los principales inconvenientes es que en la actualidad, debido al tipo de sofisticación que se necesita para su obtención, sigue siendo un combustible caro en comparación con otras formas de combustión.Aunque diversos estudios aseguran que a mayo demanda y mayor investigación, debería disminuir su precio y por tanto se volvería más rentable aproximadamente en los próximos 10 años. Pero como nadie tiene una bola de cristal, no deja de ser una hipótesis.
Esto hace que en la actualidad el hidrógeno como combustible no pueda competir a nivel de mercado con otros tipos de fuentes energéticas como la nuclear y los combustibles fósiles como el gas, el petróleo y el carbón.
Otro de los inconvenientes del hidrógeno como combustible es que en la actualidad su obtención continúa necesitando y dependiendo de otras fuentes de energía que podrían no ser muy limpias.
Una última desventaja es la capacidad de almacenamiento de esta forma de energía, que también sigue siendo cara y necesita de depósitos de mucho mayor volumen que otras fuentes energéticas. Uno de los principales problemas y barreras a la hora de estandarizar su uso.
Conclusión
El hidrógeno como combustible, junto a otras fuentes de energías renovables como la fotovoltaica parecen ser los que más prometen. Son realmente limpios y sostenibles y su fuente es prácticamente infinita y constante, aunque en el caso del hidrógeno se necesitan muchos estudios y mucha más inversión en investigación para conseguir que su precio de mercado baje, su uso doméstico sea considerado realmente seguro y su proceso de democratización sea equiparable. Es decir, para que se pueda hablar realmente de una energía limpia.Fuente: este post proviene de Blog de ecocosas, donde puedes consultar el contenido original.
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