Si como yo no tienes especial paciencia para cocinar todos los días, pero a la vez quieres comer sano y equilibrado, el Batch Cooking es para ti. En mi casa supuso toda una revolución y ya no puedo vivr sin este sistema.
Mi madre es una persona muy dedicada. Lleva toda la vida cocinando para toda la familia día tras día. Aunque intenté hacer como ella, a mi NO ME DA LA VIDA para tanto cocinar…¿a ti también te ocurre? Así que pasando por fases de macarrones-tomate-atún y comer de restaurante todos los días, llegué a este gran descubrimiento.
Simplemente lánzate a cocinar. Soy la menos indicada para explicarte cómo se hace. No querrás que te de consejos, cuando te cuente que alguna vez eché sal al bizcocho… pero la técnica me la conozco bien y soy un as como pinche de cocina, ¡algo es algo!.
Qué es el Batch Cooking
Batch cooking significa en inglés “cocina por lote”. Es un método de cocina que consiste en preparar el menú de toda la semana de una sóla vez. Un día en unas pocas horas cocinas recetas diferentes para desayunar, comer y cenar los días siguientes.Es un buen sistema para las semanas en que no dispondrás de mucho tiempo. También es ideal para llevar al trabajo, estarás tranquilx por unos días.
Cómo se hace el Batch Cooking
Para empezar planifica tu menú en función de las comidas previstas para la semana. Sabiendo lo que vas a comer, podrás hacer una lista de ingredientes que te hacen falta para preparar esas delicias. Lista en mano, la compra harás y en casa, cocinar podrás.Mientras el horno precalienta, aprovecha ese calor para tostar por ejemplo la granola. Luego pasa a los platos principales. Cocinando al vapor, hierve tubérculos o legumbres abajo aprovechando el agua que se evaporará para la preparación de arriba. La idea es ir cocinando varios platos a la vez, no esperes a tener una receta acabada para empezar con la siguiente.
Una orientación es cocinar 3 platos principales, ensaladas, potages y algo dulce.
Cereales, legumbres y pasta cocidos. Hiervo arroz, lentejas o pasta y los guardo puros. Para mezclarlo con lo que más me apetezca según el día.
Ratatouille (pisto). Guiso verdura como tomate, berenjena, calabacín y pimiento para después meterlo en un bocadillo o mezclar con arroz o pasta.
Verdura. Troceo y las conservo en táperes diferentes: tomate, pepinillo, zanahoria…
Huevo duro. Cuezo huevos para añadir a la ensalada o acompañar una comida.
Potage, Crema, Sopa. Cocino para tomarla calentita varias noches por semana.
Granola. Horneo copos de avena para volverlos crujientes y mezclo frutos secos y frutas secas. Para añadir a mis yogures mañaneros.
Quiche (tarta salada). Es un receta tan versátil que la preparo muy a menudo. Ideal para llevar al trabajo o de picnic porque se come muy fácil e incluso fría.
Bizcocho. ¿A quién amarga un dulce? Para desayunar o merendar de vez en cuando.
Para conservar tus exquisiteces usa el frigorífico si lo requieren. Puedes utilizar táperes, frascos de cristal tipo conservas y bee’s wrap. Las legumbres se conservan por ejemplo 3 días.
Ventajas del Batch Cooking
Rentabilizas tiempo. Con una buena planificación, disminuirás las horas que inviertes en la cocina, pues únicamente cocinas una o dos veces por semana.
Economizas dinero y recursos. Si compras los ingredientes rigiéndote por el menú semanal, adquieres sólo lo que vas a usar y no tirarás porque no sobra.
Ahorras energía. Como enciendes el hornillo sólo un par de veces por semana en lugar de los 7 días, ahorras electricidad, gaz, madera y todos esos recursos en juego.
Es saludable. Si quieres llevar una dieta equilibrada, variada y natural, has de saber qué es lo que comes y para ello tienes que amasar con tus propias manos la masa.
¡Buen provecho!