Este 2024 parece no darnos respiro en cuánto al medioambiente se trata. Hace unos días se empezó a detectar una cantidad alarmante de pellets de plástico en las costas gallegas. Esta catástrofe medioambiental ocurre como consecuencia de la pérdida de unos contenedores procedentes de un barco carguero al norte de Portugal, durante el pasado mes de diciembre.
Ahora, los pellets ya no sólo inundan la costa gallega; debido a las corrientes ya han llegado a Asturias, Cantabria, y el País Vasco.
Aunque el encuentro de estos pellets de plástico haya puesto a relucir el debate sobre el vertido sistemático de este material en nuestros ecosistemas, no se trata de nada nuevo: solo en 2019 se pudieron perder hasta 184.290 toneladas de este material en nuestros mares y océanos.
¿Qué son los pellets de plástico?
Los pellets de plástico són unas pequeñas bolitas de menos de 5 milímetros de diámetro, compuestas por polietileno (PE), polipropileno (PP), y cloruro de polivilino (PvC).Los pellets son la materia prima principal para la fabricación de un gran abanico de productos de plástico como, por ejemplo, botellas, envases, juguetes, bolsas Que usamos a diario.
Estado actual de los pellets de plástico en Europa
Como os adelantaba, este vertido de pellets de plástico en las costas de Portugal, no es un hecho aislado, sino que se trata de un problema que lleva ocurriendo durante décadas.Por ese motivo, la Comisión Europea anunció su intención de regular dicho material, ya que actualmente carece de cualquier control en el marco legal europeo, a diferencia de otros productos de plástico. Y es que los pellets logran escapar de las limitaciones vigentes porque no están considerados como residuos, sino como materia prima. Recordemos que es el compuesto principal de una infinidad de productos de plástico.
Y aunque hay evidencias y cifras en relación con la cantidad de pellets que se pierden a lo largo de los años, no existen regulaciones internacionales que obliguen a las empresas a adoptar medidas para evitar la vertida de este producto en nuestros ecosistemas.
Efectos nocivos de los pellets de plástico en los ecosistemas
Uno de los efectos más inmediatamente preocupantes de la presencia de pellets de plástico en nuestros mares y océanos es que los animales como aves y peces puedan confundir estas pequeñas esferas con alimento y terminen ingiriéndolos. La ingesta de pellets puede suponer problemas gástricos y digestivos para estos animales, y en los peores casos, incluso la muerte.Con el consumo de pellets por parte de la fauna, estos estarán incluidos en la cadena alimentaria, intoxicándola, y pudiendo llegar incluso al organismo humano.
Según World Wildlife Fund (WWF), los humanos consumimos micropartículas de plástico equivalentes a una tarjeta de crédito a la semana, suponiendo un total de unos 250 gramos anuales.
Además, la presencia de los pellets en nuestros océanos y mares influye en la biodiversidad y los ecosistemas, y puede alterar la capacidad habitual de las especias para sobrevivir y reproducirse.
Aunque la inclusión de los pellets de plástico en la cadena trófica es una de las consecuencias más evidentes y visibles a corto plazo, también pueden generar un gran impacto en otros ámbitos, ya que si este pequeño material interfiere en la vida de los animales del ecosistema, también las actividades económicas locales podrán verse afectadas.
¿Qué podemos hacer nosotros para mitigas la crisis de pellets de plástico?
La contaminación por pellets, y en general por plásticos y microplásticos, es un gravísimo problema a nivel global. Lo que está pasando ahora mismo en Galicia es solo la punta del iceberg. Pero hay muchas acciones que podemos llevar a cabo como individuos para mitigar el problema:Reducir el consumo de productos de plástico, sobre todo aquellos de un solo uso.
Usar materiales alternativos al plástico. Por ejemplo, papel, cartón, vidrio, metal
En caso de usar productos de plástico, intentar alargar su vida útil, reutilizándolos y dándoles otras funciones.
Sensibilizar a nuestra familia y amigos sobre el consumo de plástico. A veces es una tarea ardua mantener y divulgar nuestro discurso sobre Zero Waste y reducir el consumo de plástico, y aunque no tengamos la obligación a hacerlo, siempre podemos recurrir al diálogo y a argumentos para contribuir a cambiar alguna conciencia.
Participar en iniciativas de limpieza. Recuerda ponerte en contacto con las entidades responsables que lideren el proyecto (si las hay) para saber cómo proceder, o si debes tener alguna consideración en especial. Si participas en limpiezas de pellets, es muy importante que sepas como deshacerte de ellos. No podemos tirarlos en los contenedores habituales porque son residuos industriales, no domésticos, y es preciso determinar su composición exacta y su toxicidad, por lo que es importantísimo que las recogidas se hagan de manera coordinada con los Ayuntamientos y que sean ellos los que se hagan cargo de los residuos.
Apoyar iniciativas que denuncien el uso masivo y descontrolado de pellets.