Por el equipo Slow Fashion Next.
Hoy nos hacemos eco de la nota de prensa que nos llega a través de la organización Vida Sana – Biocultura, en la que presentan el proyecto Ecofibra:
La mayor parte de la industria textil se sitúa en países pobres. Esto implica por un lado procesos de transformación no sometidos a regulaciones ambientales y transportes a largas distancias con una importante huella de carbono. Sin embargo, España ofrece posibilidades de producción de fibras naturales que actualmente son un residuo como la lana o de cultivo muy minoritario como el cáñamo o el algodón.
España produce un 21% del algodón de la UE. Actualmente un 70% se produce bajo criterios de producción integrada. El mantenimiento de las explotaciones de carácter familiar pasa por ofrecer un producto de calidad como alternativa al algodón transgénico que ya es mayoritario en el mercado mundial. Pero sin embargo, este valor añadido no se tiene en cuenta en el mercado y es raro que el sector lo utilice como argumento de venta y lo ofrezca como opción al consumidor.
Por otro lado el sector textil es un gran consumidor de compuestos químicos utilizados en casi todas las fases del proceso de transformación. Apostar por el uso de fibras naturales, de producción local, evitaría el consumo de muchos de estos aditivos.
Para dar respuesta a estos problemas nace el proyecto Ecofibra.es. Es un proyecto que se desarrolla dentro del Programa Empleaverde de la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente cofinanciado por el Fondo Social Europeo. Y se dirige a autónomos, emprendedores o trabajadores de empresas que trabajan o quieren trabajar en el sector textil sostenible ya sea desde la producción de fibras naturales, la manufactura de textiles, el diseño con textiles naturales manufacturados en España o la comercialización.
Su objetivo es impulsar el sector de la moda elaborada con fibras textiles sostenibles y locales. Lo natural está de moda y hay un gran potencial de aumento del consumo de fibras naturales de producción nacional como el algodón, la lana o el cáñamo. Pero para ello es necesario que los diferentes actores conozcan bien el producto y como utilizarlo.
Recuperar y potenciar el cultivo y los procesos de transformación asociados a las fibras naturales sería un motivo de recuperación económica y social en las comunidades, promocionando puestos de trabajo y recuperando profesionales con experiencia y con un conocimiento que de otra forma se perdería.
El proyecto se desarrolla en dos Comunidades Autónomas: Andalucía porque allí se concentra el algodón cultivado en España y Cataluña por su relación con la industria del textil. Dos comunidades que pueden ser ejemplo de cómo impulsar el sector de forma colaborativa.
El proyecto ofrece formación presencial y online sobre la producción de fibras naturales, manufactura de textiles verdes, la integración de estos materiales en el diseño y la mejora de la comunicación para impulsar el consumo. El proyecto incluye también asesoramiento personalizado a distancia para empresas y autónomos y difusión de la información más demandada. Todas las acciones son gratuitas y cofinanciadas por el Fondo Social Europeo.