La colofonia se utiliza sobre todo en la elaboración de jabones transparentes, ya que aporta una claridad al jabón extraordinaria, a parte de una abundante espuma y un tacto muy suave. Le aporta al jabón más consistencia y sirve además como conservante (haciendo que la pastilla dure más tiempo). Saponifica igual que los aceites pero sin producir glicerina.
Hay que tener precaución con la cantidad a utilizar ya que un exceso de colofonia puede ablandar el jabón, y para compensarlo se suele utilizar junto con el ácido esteárico.
Dosis: cómo máximo el 5% del peso total de los aceites.
Forma de uso: primero tenemos que diluir la colofonia en el ácido esteárico y cuando se haya disuelto completamente lo mezclaremos con el resto de los aceites, en el paso previo a añadir la lejía.
El color resultante del jabón es un precioso color marrón claro transparente.