Esto se evidencia en que nos preocupamos en mayor medida por nuestra adecuada nutrición, razón por la que el 81,28% ha cambiado sus costumbres alimenticias en los últimos años: consume menos alimentos procesados, no recurre tanto a los precocinados y ha cambiado su dieta para incorporar criterios de salud en la compra y el cocinado.
De igual forma, demostramos ser conscientes de la responsabilidad para con nuestro entorno y sensibles al problema de la sostenibilidad. Por ello nos ocupamos cada vez más de proteger el medio ambiente –el 81,96% separa correctamente la basura, reutiliza más que antes y reduce el consumo de energía y agua-.
Dos esferas la de la salud y el medio ambiente que tienen en las RRSS su principal motor de cambio en lo que se refiere a las costumbres. Las usamos sobre todo para consultar información, vigilar la alimentación y saber sobre nuevas dietas, alimentos, etc -el 56,47% la cuidan más desde que cuenta con ellas- pero también nos proporcionan consejos para cuidar de nuestro hábitat.
La cocina: fiel reflejo de las transformaciones sociales
Las transformaciones sociales que estamos viviendo y que repercuten en cómo somos, nos comportamos y evolucionamos se pueden observar en nuestro día a día. A ellas han contribuido, entre otras causas, la mayor concienciación sobre la salud y la sostenibilidad así como un entorno marcado por la globalización que determina que los hábitos de consumo reflejen los patrones de un mundo cada más conectado e interrelacionado.
Estos son algunos de los datos del Informe “Global Kitchen: la cocina, el corazón del hogar”, realizado por el Instituto Silestone, que estudia cómo se materializan en el diseño y uso de esta estancia, los cambios sociales y los nuevos modos de vida del siglo XXI. Para el estudio se ha contado con la opinión de 23 expertos internacionales y los resultados de encuestas realizadas a ciudadanos en 9 países.
A.-) LA OPINIÓN DE LOS CONSUMIDORES*
La encuesta realizada a consumidores evidencia que los nuevos hábitos y estilos de vida tienen su reflejo en la cotidanidad de nuestras casas en general y de manera especial en la cocina.
Se concibe como espacio para el cuidado de la salud y el bienestar.
El 81,28% de los españoles han cambiado los hábitos alimentarios en los últimos años. Del total un porcentaje, que el 29,72%, ha modificado la dieta para mejorar la salud, mientras el aproximadamente 50% restante se divide entre los que han incorporado varios o algún alimento que antes no consumían. Solo el 18,7% dice comer lo mismo de siempre.
Otro aspecto a destacar es que 40,74% dice consumir menos alimentos procesados –cifra superior a la media del 31% de otros países- y que otro 39,46% declara cocinar adecuadamente los alimentos y dejar a un lado los precocinados. Mientra al casi 19,29% le preocupa la procedencia de los productos alimentarios.
Su uso está condicionado a todos los niveles por la conciencia medioambiental.
El 35,91% separa correctamente la basura que genera; el 18% utiliza menos plástico –tanto por ciento ligeramente inferior a la cifra del resto de países situada alrededor del 21%-; Cerca del 20% reutiliza más que hace unos años -16% en el caso de los demás países-; 26,35 reduce el consume de agua y energía; también el 69,98% empleamos nuestras propias bolsas y procuramos comprar productos sin envase -frente al 52% en el caso de los demás países-; por encima del 22% diversifica el lugar de compra para asegurar la procedencia y la calidad; el 5,31% da más importancia a la compra a granel -versus el 14,5% en el caso de otros países- y tan solo el 2,75% compra mayoritariamente en Internet, a diferencia de lo que ocurre en el resto de lugares con el 13%.
Territorio dominado por las redes sociales por delante de la domótica y los dispositivos inteligentes.
Cerca del 40% utiliza las RRSS para informarse sobre nuevas dietas, alimentos, recetas, etc –en el caso de los demás países esta cifra supera el 52%-; casi el 14% recurre a ellas para informarse sobre cómo reciclar, reutilizar y reducir residuos.
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* Una encuesta online realizada al consumidor final de nueve países -España, Australia, Canadá, Emiratos Árabes, Escandinavia, Estados Unidos, Italia, Reino Unido y Singapur- y en ocho -España, Australia, Canadá, Emiratos Árabes, Estados Unidos, Italia, Reino Unido y Singapur- en el caso de las redes sociales–Facebook–
B.-) LA OPINIÓN DE LOS EXPERTOS**
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**Entre los que se encuentran los chefs Albert Adrià, José Andrés y Paco Roncero; el director General del Basque Culinary Center, Joxe-Mari Aizega, la especialista en historia de la alimentación, Amy Bentley, la socióloga, Nita Mathur o la interiorista, Megan Pflug. Junto a ellos también lo han hecho otras personas relevantes del mundo de la nutrición, la gastronomía o la arquitectura.
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El binomio alimentación-salud, plenamente interiorizado, se materializa en la cocina. La preocupación por un estilo de vida más saludable, tanto a nivel físico como mental, se constata en el interés por conocer tanto la procedencia como las propiedades nutricionales de los alimentos. A ello se añade la disminución en el consumo de alimentos procesados y precocinados.
La conciencia medioambiental a todos los niveles. Se traduce, por un lado, en la progresiva transformación en los hábitos de compra y otros comportamientos: cada vez tienen menos cabida las bolsas y envases de plástico, ganan importancia el suministro a granel y los productos de temporada y proximidad. Y por el otro, la cocina se convierte en el espacio en el que profundiza en la conservación y reutilización de alimentos para evitar su desperdicio.
En la cocina del siglo XXI las redes sociales cobran protagonismo, incluso por delante de la domótica y dispositivos inteligentes. Y se convierten en motivo para pasar más tiempo en ella, convirtiéndose en fuente de información para cosas como los cambios en la dieta mediante blogs, Twitter, Facebook, Instagram o tutoriales de YouTube.
Además las RRSS tienen otro papel fundamental como es ser una de las principales herramientas para la transformación de los hábitos de consumo en base a criterios de eficiencia energética, sostenibilidad o reciclaje.
El Instituto Silestone es una plataforma internacional, impulsada por el Grupo Cosentino, para investigar y difundir conocimiento en torno al espacio de la cocina, tanto doméstica como profesional.
¿Que te parece? ¿Te sientes identificado?
Nos preocupamos por la salud: más del 80% ha introducido cambios en sus hábitos de alimentación y somos los que menos alimentos procesados consumimos –cerca del 41%- en comparación con otros países.
Alrededor del 82% protegemos el medio ambiente: ganamos en reutilizar y usar nuestras bolsas a la hora de ir a la tienda pero perdemos cuando se trata de reducir el consumo de plástico o comprar a granel.
Recurrimos a las RRSS sobre todo para cambiar nuestras costumbres alimenticias – cerca del 40%- y para el cuidado del entorno -14%-.
Gracias por tu visita!
Anabel
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