¿Julio sin plásticos? sí, no se trata de volverse locos tratando de encajar en un mundo rodeado de plásticos, se trata de visualizar nuestros consumos, pensar cómo podemos cambiar-mejorar y actuar. La primera vez que supe sobre este movimiento fue hace más o menos un año y de alguna forma me hizo sentir optimista y me motivó a continuar con mis intentos de reducción de plásticos y residuos.
A mi me parece la forma perfecta de hacer una (aparentemente) pequeña acción que puede ayudarnos a iniciar un nuevo hábito, porque lo que inicialmente se ve como un reto, una vez que termina el mes de julio se puede volver parte de nuestra rutina y de nuestra consciencia como consumidores.
La contaminación del plástico es uno de los grandes problemas a los que se enfrenta nuestro planeta y el mundo se está dando cuenta, lo cual es bueno porque el primer paso para la toma de acción es justamente reconocer el problema.
Seguramente te has conseguido con videos donde se muestran tortugas atrapadas en redes o en bolsas plásticas, o con un pitillo (pajita) en la nariz o incluso un tenedor, o imágenes de peces con trozos de plástico en el estómago. Y ni hablar del BPA y otras sustancias que contiene el plástico, cancerígenas y dañinas para la salud.
El plástico es hecho a partir de petróleo, se necesitan muchos recursos para fabricar una bolsa o una botella plástica, y todo para que al final, se le de un uso de solo unos minutos para posteriormente acabar en:
Contenedor amarillo, eso en el mejor de los casos, y el reciclaje si bien es una de las famosas R aunque es un buen paso, no es precisamente la mejor solución. Los índices de reciclaje son muy bajos, no todo se puede reciclar y el hacerlo conlleva un proceso industrial, recursos y por ende, más contaminación.
Vertederos e incineradoras, si usas y no reciclas seguramente uno de estos dos será su destino, lo que se traduce en contaminación del suelo, aire y agua… ¡nada bueno!
Océanos, lamentablemente muchos, muchísimos de nuestros residuos plásticos acaban en los océanos y causan un gran impacto en nuestra salud, los animales y toda la vida marina e incluso afectan las economías de los países. Se cree que para el año 2050 habrá más plástico que peces en nuestros océanos ¡qué tristeza!
No quiero sonar alarmista pero la realidad es que el plástico es un gran inconveniente, porque si acaba en cauces de agua eso es contaminación para tu bebida, luego es ingerido por peces u otros animales y es un ciclo que afecta toda la cadena alimenticia, en pocas palabras, te estarás comiendo los plásticos que utilizaste.
Este video explica perfectamente el ciclo de vida de una botella plástica (subtítulos disponibles en varios idiomas).
Para subsistir necesitamos unos de otros, necesitamos del planeta más de lo que el planeta nos necesita a nosotros. Al evitar el uso de plásticos no solo reducimos el daño ambiental sino que le decimos a las empresas lo que estamos dispuestos a consumir y a pagar.
Por eso se inició el Plastic Free July o en español, julio sin plásticos, para crear consciencia sobre el gran problema que representan los plásticos de un solo uso. Hoy en día ya se han unido (de forma oficial) más de 40.000 personas en más de 90 países y ¡tú también puedes unirte! Lo único que tienes que hacer es sumarte al reto de rechazar los plásticos de un solo uso, idealmente por un mes pero puedes hacerlo por un día, una semana o el tiempo que tú quieras.
Algunos tips que te pueden ayudar:
1. Estudia tu basura, piensa en lo que puedes eliminar y cómo puedes lograrlo.
2. Enfócate en los principales plásticos de un solo uso, bolsas, botellas, vasitos y pitillos (pajitas). Puedes evitarlos al hacer uso de tus reusables como: bolsas de tela, botella reusable para el agua, tu propia taza y procura rechazar los pitillos (pajitas), son completamente inútiles (también puedes comprar unos reusables de acero inoxidable).
3. Compra a granel si te es posible, es una excelente forma de evitar empaques plásticos de un solo uso.
4. Agárrale el gusto a la cocina, muchos empaques plásticos vienen de la comida ya lista o de las entregas a domicilio. Cocinar es una forma de compartir con amigos o en familia y de aprender nuevas habilidades, además de ser más sano. ¡No te preocupes! no necesitas ser chef, puedes empezar de a poquito buscando recetas fáciles que te gusten y seguramente luego te irás entusiasmando y mejorando… ¡te lo digo por experiencia!
5. Infórmate sobre los problemas del plástico, es dañino para la salud y está matando la vida marina y nuestros ecosistemas.
6. Alza tu voz, cuando vayas de compras hazle saber a los comerciantes que no quieres bolsas o empaques plásticos.
7. No necesitas comprar cosas, no se trata de substituir tus utensilios plásticos por unos nuevos de otro material, se trata de reducir y evitar el consumo de nuevos plásticos. Si necesitas comprar algo ¡claro! intenta que sea de materiales inocuos y de fuentes sostenibles. Irene, La Recolectora tiene una entrada que explica muy bien este punto.
8. Ten paciencia, lamentablemente el plástico está en todo lados y al principio puede parecer imposible evitarlo pero no te apresures, ve paso a paso y a tu propio ritmo. Entrar a tiendas diferentes de donde acostumbras, puede ayudarte a ampliar tus horizontes y a dar con grandes descubrimientos.
Y ¡eso es todo! aunque también quiero comentarte que si tienes la oportunidad, te recomiendo ver este documental que habla sobre el plástico, sus peligros para nuestra salud y como está afectando al planeta.
Sé que minimizar el consumo de plásticos suena difícil pero por algún lado hay que comenzar ¿te animas? ¿tienes algún otro tip? ¿alguna duda? ¡Cuéntamelo en los comentarios!
Fuente: este post proviene de Little Big Actions, donde puedes consultar el contenido original.
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