Con los jabones transparentes no hay sorpresas con el color final del jabón, porque el proceso termina cuando el pH es adecuado y por lo tanto el color que le agreguemos no variará al reaccionar con el medio.
¿Por qué un jabón se vuelve transparente?
Si alguna vez has hecho jabón por la técnica de saponificación en frío habrás comprobado que unos minutos después de verter el jabón en el molde comienza a gelificarse (convertirse en gel), y tal como explicamos en el artículo de la gelificación (lo puedes ver aquí), el jabón se vuelve translúcido, y con apariencia de gel, debido a que aumenta la temperatura de la mezcla al iniciarse el proceso de saponificación. Si seguimos manteniendo ese calor, la gelificación puede completarse del todo o puede interrumpirse el proceso y conseguir jabones más opacos.
¿Por qué se pone opaco el jabón?
Cuando el jabón se enfría se vuelve opaco porque empiezan a formarse cristales fibrosos que van entrelazándose unos con otros y aumentando en cantidad y longitud. Estos cristales son impermeables a la luz, por eso el jabón se vuelve cada vez más opaco.
Para evitar el desarrollo de esos cristales, y con ello conseguir jabones transparentes, se aplican disolventes justo en ese momento de gelificación, que impedirán que esos cristales crezcan, aunque no los hacen desaparecer, pero son tan pequeños aún que las ondas de luz pueden atravesar la pastilla sin problemas y los hacen parecer transparentes.
Se estipula que un jabón es transparente cuando podemos leer un texto con tipografía de 14 puntos perfectamente, al situar encima un jabón de medio centímetro de grueso.
Disolventes utilizados
Los disolventes más utilizados para conseguir transparencia en el jabón son la glicerina, el azúcar y el alcohol etílico (etanol). Que veremos con más detalle en el siguiente capítulo.
Puedes leer una receta de jabón transparente, en el que se utilizan estos disolventes, el siguiente artículo: Cómo hacer jabones transparentes o de glicerina.