Manteca de copoazú: cómo saponifica y propiedades cosméticas

La manteca de copoazú (también conocida como cacao blanco), extraída de las semillas del árbol del mismo nombre, es una magnifica adición a nuestros jabones porque los dotará de una cremosidad e hidratación excelente. Es muy similar a la manteca de cacao, de hecho provienen de la misma familia, pero contiene mayor concentración que ésta en ácidos grasos insaturados. 

Esta manteca al saponificar no resulta muy provechosa ya que sólo aporta persistencia a la espuma y dureza, por lo que la usaremos sólo en el sobreengrasado y en el porcentaje que vayamos a utilizar.

Propiedades físicas al saponificar:

Dureza: 55.

Burbujas: 29.

Persistencia: 54.

Limpieza: 40.

Acondicionado: 36.

Yodo: 42.

INS: 143.

Propiedades cosméticas:

Es de los aceites vegetales o mantecas que aportan mayor hidratación ya que tiene la capacidad de absorber el agua intensamente. Es justo por este motivo que se utiliza en cremas, lociones, pomadas, mantecas corporales, productos capilares (sobre todo mascarillas), barras y bálsamos labiales, maquillajes, aftershaves, etc.

Es muy recomendable su aplicación en zonas o cutis seco y extra-seco, ya que los suaviza, fortalece, les aporta flexibilidad y los regenera.

Nutre en profundidad gracias a su contenido en proteínas, calcio, fósforo, hierro, vitaminas B y C, así como ácidos grasos insaturados.

Protege la piel de los rayos UV gracias a su factor de protección natural.

Es antiinflamatoria, gracias a su contenido en fitoesteroles.

Tiene un olor delicioso y le aporta a las cremas muy buena textura, de hecho se puede utilizar como co-emulsionante en la elaboración de las mismas.