Por otro lado, como la dureza y limpieza que produce al saponificar son bastantes bajas y el yodo muy alto, es aconsejable no usar más del 15% y mezclado junto a los aceites base.
Se emplea bastante en formulaciones de bases de jabones transparentes (sólidos y líquidos) ya que se consigue con este aceite muy buenos resultados y como su precio es bastante económico, y extrae bien los fitoingredientes de las plantas, también se suele utilizar bastante para hacer maceraciones u oleatos.
Propiedades físicas al saponificar:
Dureza: 28.
Burbujas: 44.
Persistencia: 62.
Limpieza: 28.
Acondicionado: 70.
Yodo: 133.
INS: 63.
Propiedades cosméticas:
Por su alto contenido en vitamina E es un aceite vegetal perfecto para el cuidado de la piel ya que evita la oxidación de las células y por tanto su envejecimiento. Por lo tanto es ideal para pieles maduras, secas, extra secas, sensibles y atópicas.
Como no es una aceite comedogénico (no tapa los poros) también es buenísimo para cutis mixtos y grasos, ya que permite la transpiración de la piel.
Es además muy efectivo en casos de acné, gracias a su alto contenido en ácido linoleico, puesto que las personas que sufren de acné tienen deficiencia de éste ácido graso esencial que a su vez ésto provoca una producción excesiva de queratina, sebo e inflamación de las glándulas sebáceas.
Es un aceite muy suave y de absorción es rápida, por lo que resulta apropiado como aceite de masajes. Además deja la piel muy suave, hidratada y nutrida.
Se suele utilizar en cremas, sueros y todo tipo de preparaciones cosméticas.